JUSTICIA POR LILIAN Y MARIA CARMEN
El miércoles 2 de Septiembre, el gobierno paraguayo dio a conocer que las Fuerzas de Tarea Conjunta del Estado Paraguayo ingresaron en un parador del EPP (Ejército del Pueblo Paraguayo), disparando a mansalva. El saldo, titulado por el gobierno paraguayo como “Exitoso”, fue el asesinato de 2 niñas de 11 años, Lilian y María Carmen, ambas de nacionalidad argentina, que fueron a Paraguay a visitar familiares.
Probablemente las niñas fueron secuestradas, torturadas y fusiladas; y para encubrir semejante crimen propio del terrorismo de estado, las niñas fueron vestidas por los militares con ropas camufladas, presentándolas en los grandes medios de comunicación de ese país como combatientes de la insurgencia paraguaya. Y fue el propio presidente de Paraguay, Mario Abdo, quien personalmente se llegó al lugar a celebrar el asesinato de las dos niñas, anunciando además por su cuenta de Twitter que habían dado un exitoso golpe al EPP abatiendo a dos de sus integrantes.
Este hecho da muestras claras que, en dictadura o en democracia, la guerra que los gobiernos burgueses y terratenientes de Paraguay llevan adelante contra el pueblo trabajador, contra el campesinado, no hace distinción alguna de nacionalidad, género o edad. Queda claro que el gobierno paraguayo pretende imponer “a como sea” el modelo sojero agroexportador al campesinado que se organiza, lucha y defiende la madre tierra. La brutalidad con que el imperialismo y las clases dominantes de Paraguay ejercen el terrorismo de Estado contra el pueblo paraguayo no es un hecho aislado en Nuestra América. Basta recordar los “falsos positivos” que sistemáticamente lleva adelante el Estado colombiano, haciendo pasar por guerrilleros de las FARC o el ELN a militantes sociales asesinados; la masacre permanente que el imperialismo norteamericano perpetúa contra el digno pueblo haitiano con ejércitos de ocupación organizado por la ONU (MINUSTAH-MINUJUSTH); la brutal represión y tortura que han ejercido y siguen ejerciendo los gobiernos de Chile, Ecuador y Bolivia, como método para combatir el ascenso de la lucha popular en cada uno de esos países. En Argentina, por medio de fuerzas estatales y para-estatales, se reprimen luchas obreras, ambientalistas y de pueblos originarios y como forma de control social, durante la cuarentena las fuerzas represivas estatales llevan asesinadas 92 personas.
Llamamos a todas las organizaciones sociales, políticas, estudiantiles, sindicales y de derechos humanos a pronunciarse de todas las formas que les sean posibles en contra del asesinato de las niñas, pero también a levantarse contra cualquier tipo de persecución o acción que genere cualquier daño sobre las y los niños hijos de los luchadores políticos y sociales de toda nuestra América; convocamos a adherir al presente comunicado, en repudio al crimen perpetuado recientemente por el Estado terrorista de Paraguay, y a generar en los lugares donde estemos distintas acciones de solidaridad con la familia de Lilian y María Carmen y con lxs compañerxs del EPP.
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